En vacaciones nos relajamos. Con el calor salimos de la playa medio desnudos y cogemos el coche de aquella guisa: tan solo cubiertos por el bañador y unas chancletas, sacando codo por la ventanilla, con el niño sobre las rodillas de su abuela en el asiento del copiloto… total, si solo es un momento… Pero ¿sabías que es una imprudencia que pone en peligro tu seguridad y la de tu familia? Recuerda que estás vacaciones y sin prisas. Tómate el tiempo que necesites antes de ponerte al volante para que viajar en coche no suponga una imprudencia.

Conducir descalzo, sin camiseta o en bikini no es seguro

Que te gusta conducir descalzo, sin camiseta, en bikini… ¡error! El Reglamento General de Circulación, disponible en la web de la DGT, no lo prohíbe expresamente pero indica que los conductores deben estar en todo momento en condiciones de controlar sus vehículos y parece que así ataviado no se garantiza la seguridad.

Tampoco debes conducir sin la camiseta, blusa o camisa puesta. No se trata de una norma de decoro al volante, si no de evitar las posibles heridas y rozaduras que puedes sufrir por el cinturón o el airbag en el caso de sufrir un accidente.

El gesto de ponerse el cinturón es casi un acto reflejo para la mayoría cuando nos sentamos al volante. Sin embargo, en trayectos cortos y con calor hay quien opta por prescindir de él. Si conoces a alguien así, recuérdale este dato: tener un accidente circulando a solo 45 km/h sin cinturón equivale a caer desde un tercer piso. Seguro que le hace reflexionar.

Siempre, siempre, los niños con su sistema de retención

Que levante la mano quien no haya visto un coche camino de la playa cargado de adultos con los niños sobre sus rodillas… Es una imagen que aún podemos encontrarnos, sobre todo en verano. Las prisas, el cambio de vehículo; “yo me llevo a los pequeños, las sillas y la comida; el tío que lleve la sombrilla, a la abuela y los primos mayores….”.

Así no. Son dos imprudencias que siempre debemos evitar: circular con más pasajeros de los permitidos y con los pequeños sin su sillita. A parte de la incomodidad, se trata de un mal hábito que pone en riesgo a los ocupantes del vehículo.

En el caso de los menores de edad aún más. Todos los niños con una altura inferior a 150 cm deben viajar en su sillita, con su sistema de retención homologado y acorde a su estatura y peso. A la hora de elegir te será útil conocer antes las clasificación de sillitas para coche según edad.

¿Te gusta conducir… con el brazo fuera de la ventanilla?

Es una imagen típica de anuncio: buen tiempo, coche nuevo y brazo fuera para sentir el aire sobre tu piel. Además de una posible multa de 80 euros que puede amargarte el día de sol y playa, piensa que puedes perder literalmente el brazo en caso de vuelco o una colisión con otro vehículo. Es un riesgo que debemos evitar siempre. Ten en cuenta que además la ventanilla en sí es un elemento más de protección con el que cuenta el vehículo.

Sin casco y a lo loco

No es solo una imprudencia que puede costarte la vida, sino que se trata de una infracción grave, que puede ser sancionada con hasta 200 euros de multa y 3 puntos menos del carné de conducir. La ley no solo obliga a quien conduce la motocicleta o ciclomotor, si no también a los pasajeros. Es decir, ir “paquete” no exime de llevar un casco protector.

Desde su uso obligatorio en 1992, el no usar el casco supone la inmovilización de la moto por los agentes de tráfico, y puede sancionarse también con la retirada y depósito de la misma. Es obligatorio en casi todos los países de la zona euro, pero sobre todo-sobre todo-sobre todo, es el mejor seguro para tu cabeza al reducir el riesgo de traumatismo craneoencefálico en caso de accidente.

Circular en bici también tiene sus obligaciones con el uso del casco: es obligatorio para los menores de 16 años y para todos los ciclistas en el caso de circular por vías interurbanas.

Malas prácticas al volante

Que decides ir comiendo el bocata mientras avanzas en el camino a tu destino de vacaciones (o a tu vuelta)…. Ten en cuenta que comer o beber al volante limita la capacidad de reacción y limita los movimientos. Así que apuesta por tu seguridad y opta por parar en la estación de servicio más próxima para reponer fuerzas y continuar con tu viaje.

Obviamente, tampoco se puede ir manipulando el GPS ni enviando whatsapp. Ambas prácticas restan eficacia al resto de los sentidos y ponen en peligro la conducción. Se trata además de faltas graves castigadas con multas de 200 euros y 3 puntos menos del carné de conducir. Así que programa siempre el GPS antes de iniciar el viaje o deja la tarea en manos de un buen copiloto.

En ocasiones, cuando estamos en la carretera tenemos un grado de percepción del peligro inferior al que realmente suponen estas malas prácticas.

Así que aunque sea verano y estés de vacaciones, si te pones al volante, sé prudente y piensa ante todo en tu seguridad, en la de quienes te acompañan y, por qué no, en quienes compartimos carretera contigo.