Voice, la revista de artículos y noticias del sector seguros mutuales y cooperativos del ICMIF (órgano representativo a nivel global del sector de seguros cooperativos y mutuales) entrevista en su último número a Pablo Mongelos, director general de Seguros Lagun Aro. La publicación destaca los valores cooperativos como base del éxito de la compañía y su diferenciación “para construir un mundo mejor”.

Reproducimos la entrevista íntegra publicada en voiceMagazine, marzo 2018

Portada e interior de la revista Voice

Portada e interior de la revista Voice

Puede haber poca gente en el mundo que tenga interés en el movimiento cooperativo y no haya escuchado hablar del pueblo de Mondragón, ubicado a unos veinte kilómetros al sur del golfo Vizcaya, en Euskadi (País Vasco), la región al norte de España. Mondragón, con una población de poco más de 20.000 personas, ha desarrollado fama mundial como centro de una extraordinaria historia de éxito cooperativo. Mondragón Corporación Cooperativa (MCC) enlaza una gama de empresas cooperativas individuales que suministran bienes y servicios en una poderosa federación cooperativa. Existen otros pocos lugares en el mundo en donde el modelo de negocios cooperativos esté tan profundamente integrado tanto a los negocios como a la vida de la comunidad. Por lo tanto, no es de sorprender que Mondragón también cuente con su propia división de seguros cooperativa, Seguros Lagun Aro.

“Los valores cooperativos han sido muy importantes en mi vida”

La historia de Mondragón comenzó en 1956 y Lagun Aro abrió sus puertas como aseguradora general un cuarto de siglo después, en 1982. En aquel entonces, el actual director general de Lagun Aro, Pablo Mongelos, todavía estaba en la escuela. Pablo se licenció en Ciencias de Negocios de la Universidad de San Sebastián en 1988, año en que Lagun Aro añadió un brazo de seguros de vida a sus operaciones. Luego, puso pronto lo que había aprendido en la universidad al servicio del movimiento cooperativo, empezando a trabajar inicialmente en el departamento de exportaciones de la cooperativa manufacturera de enseres domésticos Fagor Electrodomésticos.

Fue un movimiento en su carrera que difícilmente causó sorpresa. Pablo había crecido en un ambiente familiar que estaba completamente sumergido en la cooperación. Su padre, Javier Mongelos, fue una figura clave en los primeros años de Mondragón. Cuando él murió en 2016, los obituarios le rindieron tributo como uno de los líderes más significativos de la federación. Javier fue muy influyente durante los años 1980 y 1990 ayudando a establecer la dirección estratégica de MCC y trabajó como presidente del Consejo General de Mondragón por tres años de 1992 a 1995. La madre de Pablo, María Luisa, también fue muy activa en Mondragón, en su caso trabajando en ALMEN, el ala educativa de la cooperativa que gestiona – entre otras cosas – la escuela en la que el mismo Pablo recibió su educación secundaria. “La verdad es que mi vida siempre ha estado engarzada en este mundo cooperativo”, dice. “La cooperación se convierte en algo parecido a la familia de uno”, añade. “Es mi ecosistema”.

Pablo Mongelos dejó huella en Fagor Electrodomésticos, siendo ascendido al cargo de director de exportaciones y después al de gerente general de la cooperativa. Después en 2006 hizo un movimiento transversal a Lagun Aro, sumergiéndose en el lado de los seguros de las operaciones de Mondragón.

“Las entidades mutuales y cooperativas tienen un punto positivo de diferencia sobre el resto de negocios en el mundo”

Lagun Aro (el nombre es vasco, y significa que la aseguradora actúa como amigo con sus clientes) está estructurada como parte de la propiedad del banco cooperativo de Mondragón Laboral Kutxa. Este cambio se concluyó en 2011. El periodo anterior a ese momento fue difícil, cuando la respuesta regulatoria española al desplome financiero global en cierta etapa amenazó a Lagun Aro con la desmutualización. Pero el vínculo directo con Laboral Kutxa ha producido considerables beneficios comerciales a la aseguradora. Ahora sus productos se comercializan directamente a los 1,2 millones de clientes del banco, y Lagun Aro emplea la red de 335 sucursales de Laboral que se extienden desde Euskadi hasta Cataluña y otras áreas al norte y centro de España. La relación de banca-seguros con Laboral aporta el 80% del negocio de Lagun Aro, y el 20% restante llega a través de corredores y agentes. También se producen beneficios para el banco receptor. Laboral kutxa es el único banco del estado español que puede ofrecer a sus clientes acceso directo a personal especializado con experiencia en seguros.

Pablo Mongelos en la convención de corredores de seguros de Lagun Aro en 2017

Pablo Mongelos (izquierda) en la convención de corredores de seguros de Lagun Aro en 2017

Pablo Mongelos comenta que la integración comercial de Lagun Aro, la cual fue implementada en 2013, ha funcionado muy bien. “El hecho es que ha sido un gran éxito y no hemos tenido ningún problema real al tener dos canales de distribución”, añade. También hay espacio para crecer. Actualmente, Lagun Aro cuenta con aproximadamente 360.000 asegurados, así que queda espacio considerable para comercializar seguros a los demás clientes de Laboral kutxa.

Los años recientes han contemplado un crecimiento bien recibido tanto en el ingreso por primas, como en la rentabilidad de Lagun Aro, en donde las primas netas se elevaron 3,6% en 2016 a 116 millones de EUR (140 millones de USD). El seguro de automóviles representa más de la mitad de este negocio (65 millones de EUR), y los seguros de daños a la propiedad también son un elemento significativo. Los seguros de vida aportan 49 millones de EUR adicionales, o aproximadamente 30% del total del negocio.

“Es vital inculcar una cultura de cambio. Ahora más que nunca, nos tenemos que preparar para un cambio continuo”

Sin embargo, Pablo es categórico al decir que esto no es motivo de dormirse en los laureles, y está trabajando para asegurarse de que su organización esté preparada para cambios profundos. “Nos encontramos en la parte más intensa de un tiempo de grandes cambios, cuando las nuevas tecnologías y las nuevas formas de comportamiento de los consumidores traerán innovaciones importantes en todos los sectores de la economía,” sostiene. Los seguros, añade, serán uno de los sectores que se transformarán más profundamente.

“Ahora es el momento en que tenemos que ser más ágiles” dice. Habla del deber de asegurarse de que Lagun Aro sea capaz de satisfacer las necesidades cambiantes de sus clientes, y ciertamente de preverlas siempre que sea posible. Una tarea consiste en ofrecerles nuevas maneras de comunicarse con la aseguradora. El enlace de Lagun Aro con la Banca online de Laboral Kutxa ha funcionado bien, y otra innovación reciente (nuevamente en colaboración con Laboral Kutxa) ha sido el desarrollo de una aplicación para teléfono móvil para uso de los asegurados. La aseguradora también está desarrollando una aplicación innovadora que la enlaza directamente con talleres de reparación de autos, lo que le permite manejar las secuelas de los accidentes automovilisticos más efectivamente para los socios.

“Es importante que en medio de todo el vórtice de cambio al que nos enfrentamos no perdamos de vista nuestros valores sociales”

Pablo Mongelos es muy consciente de los cambios tecnológicos transformadores que se dirigen hacia nosotros rápidamente, hablando, por ejemplo, de las implicaciones para las aseguradoras de los vehículos autónomos y del Internet de las Cosas. Esto significa que las maneras organizacionales de trabajar tienen que estar abiertas al cambio. “Yo creo que es vital inculcar una cultura de cambio. Ahora más que nunca, nos tenemos que preparar para un cambio continuo”, afirma.

Pero también cree que Lagun Aro, y otras aseguradoras dentro de la familia de la ICMIF, tienen un as bajo la manga: los valores del centro del sistema de creencias cooperativo. “Estos valores han sido muy importantes en mi vida” dice. “Es importante que en medio de todo el vórtice de cambio al que nos enfrentamos no perdamos de vista nuestros valores sociales. Estos son lo que nos dan la oportunidad de poner nuestro granito de arena para construir un mundo mejor”.

Pablo Mongelos en la sede de Seguros Lagun Aro

Pablo Mongelos en la sede de Seguros Lagun Aro

Siguiendo los pasos familiares

Pablo Mongelos fue el cuarto de cinco hijos, y él mismo ha seguido el ejemplo de sus padres en este respecto, con cinco hijos también. Su hija mayor, Laura, ahora tiene 26 y su hijo más joven, Ander, tiene 18, pero su familia aún juega un papel muy importante en su vida. Claramente los han criado para compartir el amor de su padre por las montañas. Siempre que le es posible, dice, encuentra tiempo para dirigirse a las montañas en el área de Euskadi, en donde vive, y una quincena del verano también la dedica a caminar en las montañas en compañía de otros miembros de su familia. “Me gusta ir al extranjero por quince días con mis hijos e hijas, generalmente sin seguir ningún arreglo planeado previamente, sino inventando las cosas sobre la marcha. La única cosa que decidimos por adelantado es a dónde iremos. Hemos estado, por ejemplo, en Noruega, Escocia, Inglaterra, Croacia, Irlanda y Marruecos”, explica.

El interés de Pablo más allá de Euskadi y España no se limita a sus vacaciones. Por mucho tiempo, su cooperativa ha desempeñado un rol activo tanto en la ICMIF como en el órgano europeo de la ICMIF, la AMICE. Y es que Pablo no habla solo de cooperación, sino de intercooperación. En otras palabras, cooperación entre cooperativas. “Yo creo que las entidades mutuales y cooperativas tienen un punto positivo de diferencia sobre el resto de los negocios en el mundo. Creo que es importante afirmar esto, no olvidando colaborar entre nosotros. La intercooperación es un componente importante del éxito”.


Esta entrevista ha sido publicada con consentimiento de VoiceMagazine y está disponible en inglés, francés, español y japonés en el sitio web de ICMIF, la Federación Internacional de Cooperativas y Mutuales de Seguros de la que Lagun Aro es la única aseguradora miembro de España.