Nos pasamos el día navegando por Internet, bien por motivos laborales o personales. Y, a veces, no nos damos cuenta de que vamos dejando huella allá por donde pasamos. Pero ¿sabes cómo puedes proteger tu privacidad para no comprometer tus datos?
Sigue estos sencillos consejos:
- Desactiva la geolocalización (GPS y WiFi): algunas redes sociales como Twitter y Facebook incluyen la localización desde la que el usuario envía sus mensajes, lo que puede tener consecuencias no deseadas. Por ejemplo, los cacos pueden saber que no estás en casa y aprovechar para robar en tu domicilio.
- Activa el Wi-Fi solo en caso de necesidad: si tienes un smartphone con conexión WiFi no intentes conectarte a todas las redes que encuentres, muchas de ellas no son legítimas y además tu terminal guarda un listado con todas las redes a las que te sueles conectar, lo que puede permitir a un intruso conocer los lugares que frecuentas más a menudo.
- Cierra las sesiones de todos los servicios que requieran autenticación del usuario: parece obvio pero es importante que lo hagas (correo electrónico, servicios financieros, etc.) porque si no, puede ser una vía de acceso a tus datos para usuarios no deseados, que pueden llegar a suplantar tu personalidad.