Si eres una persona que practica deporte de forma regular, que juega en un equipo, corre maratones o hace alpinismo, es más que probable que cuentes con algún tipo de seguro que te ofrezca cobertura en caso de accidente mientras practicas tu actividad favorita. Y si no es así, deberías hacerlo cuanto antes.

Seguros para deporte: seguros de accidente

Imagen CC BY-ND 2.0 por Mikel Ugarte Gil (focalcero.com)

Normalmente, si practicas un deporte federado, a través de tu asociación, puedes contratar el tipo de seguro que te ofrezcan. Sin embargo, este tipo de seguro no es excluyente, si no que se presenta como el complemento perfecto al seguro que puedes solicitar directamente en tu compañía. Al fin y al cabo, el seguro de la federación suele cubrir aspectos como el rescate, la urgencia o la responsabilidad social, pero por lo general, no suele contar con un capital propiamente dicho. Es más, en muchas ocasiones, en la cuota por estar federado o por participar en una prueba va incluido en el coste del seguro.

La práctica habitual de deporte o ejercicio conlleva e incrementa una serie de riesgos que debemos tener en cuenta. Tenemos que  considerar si deseamos contratar un seguro de accidente, un seguro médico o un seguro de vida ya que un buen seguro deportivo nos protegerá frente a posibles accidentes o sus secuelas, lesiones u otras incidencias.

Dentro del seguro de Accidentes, hay garantías muy atractivas como la de baja laboral, por la cual recibirás un importe diario, si no pudieses trabajar. Igualmente, a través de la garantía de asistencia sanitaria, tendrás la opción de realizarte pruebas de diagnóstico, de intervención o incluso de rehabilitación. Incluso puedes disponer de una garantía de hospitalización a través de la cual cobrarás un importe diario para poder hacer frente a los gastos considerables que implican un ingreso.

Estas son sólo algunas de nuestras garantías, que van más allá de un mero seguro de accidentes. Lo cierto es que tu seguridad es lo más importante y un plan de seguros que te ofrezca coberturas que estén a la altura de tu valor, imprescindible.