A partir del 30 de junio, entra en vigor en Francia una norma por la cual los conductores que sean pillados hablando por el móvil tendrán que pagar una multa de 135 euros. Si tienes previsto pasar la frontera a partir de esa fecha, te interesará saber que en el caso de los extranjeros hay que abonarla al momento.

Como ocurre con otras normativas en el país vecino, si no abonas la multa al momento no te permiten seguir circulando. Aunque, por otro lado, no debería sorprendernos esta sanción cuando en nuestro país hace ya años que los conductores que hablan por el móvil son multados y con cantidades superiores.

De hecho, desde hace 10 años, la legislación española ha avanzado muchísimo en este sentido, con la reducción en los límites de velocidad, la obligatoriedad del uso del cinturón, de los sistemas de retención, etc. Con estas medidas, la siniestralidad ha mejorado de forma significativa en los últimos años.

Este año además entrará en vigor el nuevo Reglamento de Circulación que, entre otras medidas, sanciona con una multa de 100 euros el sobrepasar tan solo 1 km el límite de velocidad que pasará de los 120 Km/h actuales a los 130k/h en autovías y autopistas.

En las carreteras convencionales, sin embargo, con arcén de 1,5 metros, se reduce la velocidad máxima de 100 a 90 km/h; en vías urbanas se reducirá de 50 a 30. Y con estos cambios, se modifican también las sanciones por exceso de velocidad.

Las consideradas “muy graves” conllevarán 600 € de multa, 6 puntos del carné y al estar tipificadas como delito pueden acarrear penas de prisión e inhabilitación, es decir, retirada temporal del permiso de conducir.

Así que no solo por este motivo sino por tu propia seguridad y la del resto de conductores, abstente de hablar por el móvil mientras conduces y respeta los límites de velocidad,  tanto si circulas por  nuestro país como en el extranjero.